Acaba de cumplir 27 años y ha interpretado 28 films desde que cumplió los 13. En los últimos cuatro rodó nada menos que catorce películas. Realmente, la talentosa Natalie Portman es una joven muy ocupada
Nacida en Jerusalén en junio de 1981, ha llegado por cierto muy lejos, con una carrera cinematográfica que la llevó incluso a España (donde rodó junto a Javier Bardem Los fantasmas de Goya, con la dirección del checo Milos Forman) y a actuar bajo las órdenes de Wong Kar Wai, el notable autor de Con ánimo de amar, en El sabor de la noche, primera película realizada en los Estados Unidos por el célebre realizador chino que se estrenará en Montevideo el próximo viernes.
Comenzó desde muy chica, pero ha tenido mentores inteligentes. Su padre (un médico israelí especialista en fertilidad) y en especial su madre (una artista nacida en Cincinatti) se han ocupado de apoyar su trabajo, aconsejarla en sus elecciones y evitarle cometer errores. Intentó iniciar una carrera de modelo, pero al parecer su pequeña estatura desanimó a eventuales patrocinadores.
Tuvo más suerte en cine. A los doce años era la niña protegida por el criminal protagonista de El perfecto asesino (1994) de Luc Besson, pero su madre se aseguró de que el trabajo no se le subiera a la cabeza ni interfiriera en su formación. Insistió en que filmara solamente durante las vacaciones y que siguiera estudiando, lo que le permitió iniciar incluso una carrera en Psicología. También se opuso, mientras era menor de edad, a que apareciera en escenas de desnudos. Lo logró en El perfecto asesino y también en Cambio de vida (1999) de Wayne Wang, donde los productores estuvieron a punto de sustituirla. Fue gracias a la insistencia de su compañera de elenco Susan Sarandon que logró subsistir en la película. También rechazó (o le hicieron rechazar) el papel titular de Lolita (1997) por su contenido erótico. Esos remilgos desaparecerían con el crecimiento, de todos modos: Closer (1994) es un buen ejemplo de ello, y le valió un Globo de Oro y una candidatura al Oscar como mejor actriz secundaria.
Es cierto que para entonces era mayor de edad, se había independizado de sus padres, estaba a punto de terminar su carrera de Psicología y había decidido manejar personalmente su trayectoria como actriz que no es, sin embargo, el objetivo central de su vida. En más de una ocasión ha insistido en que la interesa más la psicología que el cine, y que le interesaría llevar adelante una carrera como terapeuta. En varias entrevista ha repetido que quiere vivir su propia vida, no solamente la de otras personas. En otra oportunidad, cuando le preguntaron cuáles han sido sus mayores retos había contestado: "exámenes, exámenes, exámenes". Se siente más cómoda alternando con universitarios que con actores, aunque haya tenido o le hayan inventado romances con gente como Lukas Haas o Hayden Christensen (su compañero de reparto e "interés romántico" en la saga Star Wars), a los que define empero como "buenos amigos". También se declara amiga de Susan Sarandon y nadie supone que haya tenido un romance con ella.
Es al parecer más cierto su romance con el cantante `folk` de 26 años Devendra Banhart, a quien un `bloguero` ha definido como alguien que está "más loco que una cabra". En todo caso, compartiría con Natalie una particular "locura": ambos son veganos, esa versión extrema de los vegetarianos que ni siquiera comen leche o huevos porque es un acto de explotación contra las vacas y las gallinas. Fueron vistos hace poco paseando tomados de la mano por Nueva York.
VERSATILIDAD. Entre tanto a Natalie le está yendo muy bien con el cine y también ha hecho algo de teatro, por ejemplo El diario de Ana Frank. Aunque interpretó a la princesa (luego senadora) Amidala en la segunda trilogía de Star Wars, se las arregló para no quedar encasillada como "heroína de acción" u otra de esas desgracias que suelen sobrevenir a quienes aparecen en películas comercialmente muy exitosas.
Al contrario, logró diversificarse en labores muy distintas, desde los peligrosos juegos eróticos de Closer hasta la prostituta protegida por el enmascarado antihéroe de V de venganza (2005), aportar su voz (como todo el mundo ya lo ha hecho) para un episodio de Los Simpson (2007), y sumarse a la locura de Viaje a Darjeeling (2007), la extravagante comedia de Wes Anderson en la que también actuaron Owen Wilson y Adrien Brody.
Lo que esos films revelan, con alguna excepción, es que Portman se ha vuelto progresivamente selectiva con respecto al material que interpreta. También lo ha dicho: no le interesa hacer cualquier cosa, sino trabajos que le importen por un motivo u otro y que le garanticen un nivel de calidad.
De ahí que no resulte una sorpresa encontrarla en medio del elenco de El sabor de la noche, donde no es la protagonista pero juega un papel crucial. Primer película totalmente norteamericana del chino Won Kar Wai (Felices juntos, Con ánimo de amar), el film maneja algunos temas caros al cineasta oriental: el desencanto sentimental, la adhesión a personajes itinerantes que buscan y se buscan, el recorrido a través de un paisaje humano desolado.
La verdadera protagonista de la película es la cantante Norah Jones, quien tras un desengaño amoroso emprende un viaje por los Estados Unidos. El encuentro con diferentes personajes la ayudará a descubrirse a sí misma. Portman es uno de esos personajes: una jugadora de poker que rechaza a su padre, expresa desenfado e indiferencia, y (al igual que la protagonista) está ahogada por la soledad.
El personaje de Natalie exhibe rasgos de desorientación que claramente no corresponden a la personalidad de la actriz, que ha demostrado en cambio, reiteradamente, ser una mujer inteligente y centrada. Como, por supuesto, los inteligentes parecen ser (como lo decía Nanni Moretti) una minoría de la gente, de vez en cuando tiene que hacer alguna declaración pública extemporánea para conformar a la parte del público y alimentar las polémicas en los `blogs`.
Hace algún tiempo, algunas páginas se encendieron porque cuando Natalie se rapó para actuar en V de venganza se consideró obligada a aclarar que no había hecho para el papel y no porque fuera "neo-nazi, enferma de cáncer o lesbiana". A algunos chateadores internéticos sin mucho que hacer le pareció bien que aclarara que no era neonazi, pero consideraron "de mal gusto" las referencias al cáncer y (especialmente) al lesbianismo, tema sobre el cual la corrección política prohibe bromear.
Tal vez por eso, o simplemente porque tenía ganas de escandalizar a alguna gente, Natalie dijo también en el reciente lanzamiento de su película The Other Boleyn Girl que le hubiera gustado acariciar los senos ("que son bonitos") de su compañera de reparto Scarlett Johansson y que "no descarta totalmente en el futuro salir con una mujer". No es difícil sospechar la intención de aventar las usuales (y tontas) acusaciones de "homofobia".
Entre tanto, Portman ha rechazado un papel potencialmente atractivo: el de Cathy en una nueva versión de Cumbres borrascosas a cargo del director John Maybury, quien acaba de terminar una película sobre el poeta Dylan Thomas. Por supuesto, cualquier nueva filmación del clásico de Bronté debe competir con el recuerdo de los maestros William Wyler y Luis Buñuel, pero Natalie argumentó para el rechazo, problemas de fechas.
En otros proyectos cercanos
Natalie Portman tiene actualmente dos films en posproducción. Uno de ellos es New York, I Love You, un film en episodios a cargo de varios directores (uno de los films es dirigido por Scarlett Johansson). Portman dirige el capítulo en el que actúa, luego de haber debutado como directora con otro corto, Eve.
Su otro proyecto en posproducción es Hermanos, `remake` del film danés homónimo de Suzanne Bier, de los efectos de la guerra de Afghanistán sobre una historia triangular. Actúan también Jake Gyllenhaal y Tobey Maguire.
Dos intérpretes muy jóvenes y el paralelismo de sus carreras
Hay algunos curiosos paralelismos entre las carreras de Natalie Portman y Scarlett Johansson. Natalie es tres años mayor, pero ambas han trabajado para Woody Allen (Natalie en Todos dicen te quiero, 1996; Scarlett en Match Point, 2005; Scoop, 2006, y Vicky Cristina Barcelona, 2008), ambas han hecho juntas una película histórica (The Other Boleyn Girl, 2007) donde encarnan respectivamente a las hermanas Ana y María Bolena y ambas acaban de dirigir sendos capítulos del film en episodios New York, I Love You (otros de los directores son Fatih Akin, Mira Nair, Shekar Kapur, Allen Hughes, Brett Ratner, Joshua Marston y otros).
Cuatro variantes de un atrayente rostro del cine
EL PERFECTO ASESINO
Primer largo de Portman. Tenía apenas doce años cuando actuó, en 1994, en este policial de Luc Besson donde era la única sobreviviente de un múltiple asesinato de la mafia y recibía la protección del personaje titular, un "gatillo" con buenos sentimientos encarnado por el singular Jean Reno.
STAR WARS
Ha sido la princesa Amidala en los tres capítulos de la "segunda trilogía" de la saga galáctica de George Lucas. Una de esas opciones arriesgadas que pueden comprometer la carrera de una joven prometedora (hay que pelear contra los imposibles diálogos de Lucas), pero logró aprobar el examen.
CAMBIO DE VIDA
Tal vez la película que llamó realmente la atención sobre el potencial dramático de Portman. Una historia de madre e hija en la que la joven actriz competía con nadie menos que Susan Sarandon, y ganaba casi en cada escena (Susie estaba bien, claro, pero se limitaba a actuar en piloto automático).
CLOSER
Una pirueta arriesgada que Portman sorteó con éxito. El paso de la adolescencia a la adultez, con un papel cargado de resonancias eróticas. El film no importaba, y sus ilustres compañeros de elenco (Julia Roberts, Clive Owen, Jude Law) eran un error de casting, pero ella salvaba el día.
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Natalie Portman vuelve a ser una soltera de oro. La actriz ha terminado su relación con el cantante Devendra Banhart, con el que salía desde el mes de marzo. Nada se sabe sobre los motivos de la ruptura, pero personas del entorno de Natalie aseguran que está muy afectada. Ella y Devendra se conocieron durante el rodaje de uno de los videoclips del artista, quien se quedó impresionado con la fuerte personalidad de la estrella de Hollywood. Portman rechazó cobrar por este trabajo y pidió que parte de lo recaudado en las descargas fuera destinado a fines benéficos. Quizás esta actitud tan altruista se debiera a que la intérprete también sintió el flechazo. Sin embargo, la pareja ha llevado su amor de forma muy discreta: nunca han acudido juntos a ningún acto público y sólo se les ha fotografiado paseando por las calles de Nueva York.
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